viernes, agosto 08, 2008

¿Dónde están los hombres?

Me gustaría saber ¿dónde están los hombres? ¿Ya son una especie en peligro de extinción? ¿Se agotaron porque se acerca el fin de los tiempos y alcanzaremos el anhelado paraíso? Talvez salieron del closet, quizás ya se casaron o definitivamente prefieren la soltería, lo que si tengo claro es que en los seminarios no están. Es algo increíble, todas mis amigas (que no son pocas), todas ya están al borde de un ataque de nervios porque no llega el famoso príncipe, que a estas alturas ya les da lo mismo que sea el mino ideal, ahora se conforman con un ogro mientras las quiera y las proteja. Pero ni eso aparece. Antes uno se imaginaba en los brazos de un hombre, alto, musculoso, con una cara perfecta, un cuerpo perfecto, con una sonrisa amplia y una mirada seductora. Hoy ya miran al jugo hasta los chóferes de micros (sin desmerecer) porque por mas que buscan no aparece nada que valga la pena, ninguno quiere compromiso. Y todas se preguntan lo mismo ¿qué están haciendo mal para que aún no llegue su peor es na’? Pero no son ellas las que hacen mal las cosas, simplemente los hombres escasean y lo terrible es que cuando encuentran alguno se ilusionan, pero es al final todo termina en un verdadero fracaso. Generalmente se topan con la peor muestra de su género, los mentirosos, buenísimos para hablar al oído, mamones y sobre todo malditos y miserables que sólo buscan una cama en la que revolcarse.

No, ya no hay de esos feuchitos buenos de corazón, ahora siguen siendo feos pero se volvieron perros como todos. Para que hablar de esos minazos con lo que uno sueña, abren la boca y el amor se esfuma, resultan ser los peores. Ya no quedan hombres y ya no existe consuelo para la cantidad de mujeres solas que quieren un poco de compañía, amor, comprensión o por último un pene disponible a cualquier hora del día. Parece que ahora encontrar un pololo es casi tan imposible como cazar un padrino mágico ¿Qué onda? ¿Hay que poner trampas o cosas así? ¿Debemos salir con una red a pescarlos? En todo caso, ahora empiezo a entender porque hay una ola de lesbianismo en este pueblo, si en las ciudades grandes cuesta encontrar un jeton digno y decente, en los pueblitos son menos las probabilidades. Por eso, muchas cortaron por lo sano y en vez de seguirse lamentando, prefirieron buscar el amor dentro de su misma especie. ¿Tendremos que hacer lo mismo?

Como sea, y como dijo Condorito “¡Exijo una explicación!” ¿Pero a quien se la pido? ¿A que ministro le puedo tirar un jarro de agua para que me conteste? ¿Se lo podré preguntar a la gordi? A lo mejor escasean hombres porque están todos arreglando el pastel del transantiago. Sea cual sea la respuesta lo único cierto es que hay muchas mujeres esperando el amor de su vida o lo más parecido a eso llegue a su vida, y hasta yo me estoy cansando de decir “ya llegará cuando sea el momento” porque parece que ese momento no será nunca. Finalmente, y espero que esta posibilidad no se cumpla, terminaremos como todas temen, en un convento rezando para que a otras si les llegue el tren que a nosotras nos dejó.